1.- ¿Asesor o administrativo?
Uno de los mayores males que mina el sector del asesoramiento empresarial es la disyuntiva que se produce entre disponer de unos servicios de asesoramiento reales o simplemente subcontratar un centro de proceso de datos y resultados, es decir, servicios administrativos sin mayor consecuencia en la evolución y planificación de la empresa o empresario cliente.
La selección natural, está provocando que los auténticos Asesores, quienes se preocupan realmente por el análisis integran de una compañía, desde el punto de vista fiscal, contable, laboral, jurídico, etc.. sean aquellos cada vez más elegidos por las compañías para el apoyo de su gestión, existiendo una concentración en el sector del asesoramiento.
¿Cuántas veces se ha sentido indefensos ante las administraciones? ¿Cuántas ha querido mirar atrás y tener a alguien que nos hubiese advertido y explicado las consecuencias de algunas de nuestras políticas de empresa? Esta última es la auténtica finalidad de un despacho en el cual su equipo de asesores especializados pone a disposición de la compañía toda su ilusión, profesionalidad, conocimientos y apoyo.
2.- Automatización de procesos
Tras la prolongada crisis económica y los diferentes mensajes dirigidos a la digitalización de empresas, las compañías han comprendido e interiorizado cada vez más, la necesidad de implantar sistemas informáticos para el control, desde ERPs (sistemas de gestión), CRMs (gestión de clientes), etc.., enlazados con marketing digital que permite el apoyo a las ventas de una marca, producto o servicio, por ello, cada vez es más necesario un equipo de asesores que tenga la capacidad de implementar sus sistemas con los gestores de procesos que existen en el mercado, dando mucho apoyo incluso en la implantación de los mismos, de este modo la labor de asesoramiento es más importante si cabe, ya que cada vez será menos necesario procesar documentación. La conclusión por tanto será, menos administrativos y más asesores.
3.- Recomendaciones y consejos
Desde Confislab queremos enviar un consejo a todas aquellas compañías que quieran estar preparadas para los retos que tenemos aquí.
Disponer de sistemas (software) adecuado para el control de su empresa, en todas las ocasiones permite conocer cómo evoluciona su negocio, así como tomar las decisiones más acertadas, desechando aquello que es accesorio o no rentable y potenciando lo más interesante para la compañía. Disponer de B.I. (Business Inteligent) dentro de nuestro software, además nos permite tener un panel de control de las informaciones, dando lugar a un desarrollo más ordenado en nuestro negocio.